Aprovechando la efemérides astronómica matutina del acercamiento de los planetas, hemos improvisado una "actividad extraescolar" cuya duración máxima es media hora, antes del horario lectivo ordinario. 
Mediante la observación directa y la utilización de dos aparatos muy sencillos, miramos hacia el acercamiento de los planetas Venus, Júpiter y Marte, lo cual se da durante breves semanas de este otoño. Dado que la semana que viene será retrasada la hora oficial, puesto que el sol nos impedirá la observación, hemos de apresurarnos para realizarla esta semana. 
Los alumnos aprenden así a identificar, sobre el horizonte del firmamento estrellado, los planetas, de los cuales han oido hablar en "conocimiento del medio", "cultura científica", etc. 
Les asombra, incluso a alumnos de Bachillerato, descubrir por primera vez que esa estrella que brilla tanto no es tal, sino el planeta Venus, con sus fases como la Luna; que ese otro astro, también muy brillante es el gigantesco Júpiter, etc. 
Se les invita a observar el firmamento, como hizo Tales de Mileto, el primer filósofo hace milenios, previniéndoles de cuiden de no caerse dentro de un pozo, como le sucedió a Tales, una noche estrellada.